sábado, 14 de febrero de 2009

Y una vez más...

me pregunto cómo es posible que exista gente tan caradura, cuesta creer en la maldad cuando sólo la ves en las películas o bien en el noticiero, parece tan lejana, es real pero tan distante, hasta que la experimentas en vivo y en directo.

Y mi viejo, mi viejo siempre creyendo en el mundo, una y otra vez confiando con alma y corazón en los demás, ya ni sé qué vez será ésta ¿la 142? Ya es casi un karma, pero de los karmas hay que aprender ¿no? y ¿qué es lo que deberá enseñarle cada estafa? ¿a no creer en nadie, a desconfiar de todos? ¿No debiera ser al revés? Que el que desconfía siempre, aprenda a confiar en el ser humano y no que el que es confiado y hasta coloca la otra mejilla cuando le han herido, es pisoteado a cada paso.

Viejo tonto, más bueno que el pan hasta el final y yo salí tan distinta, tan reclamona, tan groseramente confrontacional que hasta intentó callarme cuando elevé al idiota que nos falló y no me callé.

martes, 13 de enero de 2009

Cierto es...

Que cuando lloras el alma se limpia.
Que cuando llueve después ves todo más claro.
Que si tienes sed y abres la llave, dejándola correr un rato, el agua será más fría.
Que sobre esas nubes negras, siempre hay un sol y un cielo azul precioso.
Que todo es parte del proceso, del círculo de la vida.
Que ayer llanto, hoy alegría.

sábado, 22 de noviembre de 2008

"Hoy viene a ser como la cuarta vez que espero...

... desde que sé que no vendrás más nunca. He vuelto a ser aquel cantar del aguacero, que hizo casi legal su abrazo en tu cintura. Y tú apareces en mi ventana, suave y pequeña, con alas blancas. Yo ni respiro para que duermasy no te vayas..."

Lloro, no sé ni qué decir, sólo lloro, buscando refugio, abriendo el corazón en los dedos, entendiendo que quizá no hay palabras para explicar lo que siento. Hay cansancio, hastío, dolor, heridas que vuelven, dolor, dolor, dolor.

¿Cómo volver al pasado? ¿Cómo llegar a ese instante y cambiarlo todo? Que no daría por volver atrás, pero... Ya he vivido estos dolores alguna vez, que ganas de asesinarlos, de borrar el recuerdo, la memoria. De pagar por el olvido, de perderme lejos y llorar a mares, como quisiera ahora, en este instante.